Después de hablar de cerrar ciclos, de empezar el año con intención y de estar preparados para las oportunidades que llegan, hay un siguiente nivel del que pocas veces se habla con honestidad: Las oportunidades más importantes no se esperan, se crean. Crear oportunidades no es forzar la vida.Es asumir responsabilidad consciente sobre quién estás siendo, cómo decides,

Los Reyes Magos traen regalos y el nuevo año también.No siempre envueltos en papel brillante, pero siempre en forma de oportunidades: Nuevas personas o nuevas formas de relacionarnos Nuevos proyectos Nuevas conversaciones Cambios inesperados Retos que nos sacan de lo conocido  Y la clave no está en que lleguen o no esas oportunidades, llegarán, sino más bien en si estamos preparados

Hay una frase que repito a menudo en mis formaciones:“No somos un resultado, somos un proceso. Un gerundio, no un participio.”(Esencia de Ortega y Gasset, que también menciono en mi charla TEDx.) Y pocas épocas hacen tan evidente esa idea como el final del año. Diciembre llega cargado de ruido, celebraciones, balances, expectativas, prisas…Pero también nos regala

Cuando llega diciembre, también pueden llegar las conversaciones incómodas La Navidad puede reunir a personas que no siempre conviven, no siempre se comprenden y no siempre han tenido una comunicación fluida durante el año.Opiniones distintas, sensibilidades distintas, expectativas no dichas y de repente, nos encontramos en la mesa con alguien a quien queremos o apreciamos, probablemente,

Hay algo que observo cada vez con más claridad en empresas, en profesionales y también en nuestras relaciones personales: la calidad real de una relación no se demuestra solo en el momento de conseguir algo… sino después. En el mundo comercial esto es evidente.Antes de cerrar una venta, todo es atención, disponibilidad, sonrisas, respuestas rápidas, facilidades y

Si hay una idea que puede transformar la forma en que vivimos, trabajamos y lideramos, es esta: no estamos terminados, estamos siempre en construcción. Como digo en mi charla TEDx inspirándome en Ortega y Gasset, “los seres humanos somos un gerundio, no un participio”. Estamos en constante cambio y desarrollo. Y esa es precisamente la magia de la mentalidad de

En un mundo laboral cada vez más acelerado, incierto y exigente, los equipos necesitan algo más que habilidades técnicas para rendir con excelencia. Necesitan seguridad emocional: ese espacio donde las personas pueden expresarse, aportar ideas, reconocer errores, pedir ayuda y asumir desafíos sin miedo a ser juzgadas, ridiculizadas o penalizadas. La seguridad emocional no es “blandura”, ni

El caos no va a desaparecer. Pero tú puedes aprender a vivir en calma dentro de él. Vivimos en una época donde el ritmo no se detiene: correos, mensajes, reuniones, decisiones, urgencias…El estrés parece formar parte del paisaje cotidiano. Y cuando la vida se acelera demasiado, no es raro sentir que la mente y el cuerpo

No es lo que ocurre, es cómo eliges mirarlo El final del año nos invita a mirar atrás, pero también a mirar dentro.Hacemos balance de lo vivido, celebramos los logros, reconocemos los desafíos y en ese repaso silencioso aparece una verdad:No todo depende de las circunstancias. Lo que realmente marca la diferencia es la actitud con

El final del año es mucho más que una fecha.Es una invitación a parar, mirar atrás y reconocer lo vivido. A soltar lo que pesa, agradecer lo aprendido y tomar impulso para lo que viene. Los profesionales y equipos así lo sienten. Tras meses de esfuerzo, logros, cambios y desafíos, la energía fluctúa.Y ahí, la motivación y la